Quienes están aterrados por el relajo de la población en las calles y por los rebrotes de COVID-19 que se están presentando en diversas regiones del país, no han encontrado mejor opción que la psicosis. Por las redes sociales, que lo aguantan todo, están difundiendo desde hace días mensajes apocalípticos y también el cierre de mercados y centros comerciales, además de una nueva cuarentena obligada por fiestas de fin de año.
Es preocupante cómo las redes sociales y los agitadores sociales tienen ahora más credibilidad que las propias autoridades e información oficial. Las autoridades en Piura se han cansado de repetir que no se cerrarán mercados ni centros comerciales, pero los cibernautas siguen creyendo más a los instigadores de las redes, y hasta están convencidos de que se viene una nueva cuarentena.
La única cuarentena que puede aplicarse por ahora es la que establezca cada familia para mantenerse alejado de grupos numerosos, salir solo cuando es necesario y cumplir con el resto del protocolo sanitario, como el distanciamiento social, el lavado de manos y, sobre todo, mantenerse bien informado para no ser víctima de los perturbadores cibernéticos.