Resulta gravísima la denuncia del abogado defensor de la lobista Karelim López, César Nakazaki, en el sentido que no tiene garantía de imparcialidad del fiscal Omar Tello sobre este polémico caso.
No confía en él y hasta lo culpa de haber filtrado información reservada para que la aspirante a colaborador eficaz, sea amenazada de muerte el mismo momento en que declaraba a la fiscalía.
Tello es coordinador nacional de las Fiscalías en caso de corrupción de funcionarios y, según Nakazaki, si no se hubiera abierto otra investigación por lavado de activos contra la lobista, el fiscal ni siquiera hubiera tomado en cuenta declaración alguna de Kerelim, a pesar de la importancia de estas.
Este caso deja la sospecha que también el Ministerio público ha sido infestado por la corrupción.
Según la Defensoría, hasta el año pasado, más de 200 fiscales y cerca de 200 jueces, a nivel nacional, estaban siendo procesados por presunto tráfico de influencias y cohecho pasivo, dos de los delitos más comunes en este sector. Ojalá las revelaciones de Karelim no terminen siendo inútiles y desvirtuadas por la fiscalía y con ello se caiga cualquier tipo de investigación contra los corruptos.