El exministro de Salud, Hernando Cevallos, en entrevista con El Tiempo, opinó acerca del lento avance del proceso de vacunación y la polémica sobre las millones de vacunas contra la COVID-19 vencidas.
– El ministro de Salud, Hernán Condori, ha dicho que ha sido responsabilidad de las anteriores gestiones haber comprado vacunas con fechas próximas a vencer. ¿En su gestión pasó lo mismo?
Las compras de las vacunas se hicieron en el 2020; cuando yo estuve por seis meses en el Ministerio de Salud no se venció ninguna vacuna porque la velocidad de la inmunización impedía el vencimiento de las mismas, se entiende que llegan las vacunas y hay que aplicarlas inmediatamente; si hay un retraso y lentitud en la aplicación, pues se van a vencer.
–¿Su gestión también atravesó por ese riesgo de vencimiento?
Ya sabíamos que las vacunas venían con fecha de vencimiento relativamente breve y eso ya se sabía no solo en el Perú, sino en el mundo: si no se vacuna de manera rápida, pues el riesgo de vencimiento es real. Nosotros recibimos vacunas con tres meses próximos a vencer; además, nos enfrentamos al retraso de la entrega, porque los contratos les permite cierta flexibilidad a las empresas, pero la ventaja es que nosotros recibíamos y aplicábamos masivamente todas las vacunas. Teníamos cerca de diez mil brigadas.
–¿Entonces, no es justificable la excusa que ha expuesto el ministro Condori?
No, la principal preocupación del ministro debe ser aplicar rápidamente las vacunas y no buscar culpables de esa manera. Con sus declaraciones yo no me siento aludido porque esas vacunas no se compraron en mi gestión, pero tampoco debería ser un pretexto. Es importante decir que nosotros batimos récords en vacunar y no dejamos que las dosis se venzan, aplicamos 58 millones de dosis en seis meses.
–¿Por qué cree que el proceso de vacunación es lento?
La razón no es, solamente, en que justo llegarán los lotes de vacunas, sino tener la previsión de tener suficiente cantidad de brigadas, centros de vacunación, coordinar con las Direcciones de Salud para que no disminuya el ritmo de vacunación en las regiones. Está claro que las vacunas tienen poco tiempo de vida útil, así llegan desde hace casi un año.
– ¿Es aceptable tener un poco porcentaje de población con tercera dosis?
Por supuesto que la lucha contra la pandemia no se agota con las dos dosis, hay que esforzarnos por colocar las dosis de refuerzo y luego de varios meses hay que continuar protegiendo a la población.
– ¿En qué está fallando la actual gestión ministerial?
Si tú cierras vacunatorios, si despides brigadas, si le dices a la población que ya se acabó la pandemia y apruebas aforos al 100%, creas las sensación que no es tan urgente ponerse la tercera dosis, no es tan urgente vacunar a los niños, entonces va a pasar lo que pasa ahora que nos hemos estancado en la vacunación a partir de un mensaje inadecuado del Ministerio de Salud. Si te estancas en la vacunación lo que va a suceder es que se va a acercar la fecha de vencimiento y eso es una consecuencia.
– Se criticó mucho ampliar al 100% los aforos. ¿Fue prudente esa medida?
Fue una imprudencia, un mensaje equivocado; el mensaje que recibió la población es que ya estaba resuelta la pandemia y no tenemos porque preocuparnos tanto, primaron algunos intereses económicos sobre la salud. Fue un error desarmar los equipos y responsables directos de la vacunación.
– ¿Cómo reactivar el proceso?
Hay que restablecer un pacto social, hay que fortalecer el mensaje, hay que mejorar la capacidad del Ministerio de Salud de poder desarrollar la vacunación, se tiene que usar los establecimiento de salud para seguir vacunando a la población, formar e incentivar miles de brigadas de salud, contactar a los dirigentes sociales y autoridades locales para acelerar la vacunación. Todo eso ha desaparecido.