El fuerte temblor de 6 grados registrado el martes en Lima, es una clarinada de alerta sobre la advertencia hecha hace menos de un mes por el presidente del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera, quien señala que en la costa central del Perú, se espera un gran sismo de 8.5 de magnitud.
Según el especialista, múltiples investigaciones realizadas por científicos del IGP demuestran la existencia de una gran área frente a la costa central que acumula una deformación desde el año 1746 y que, al momento de relajarse, liberará energía equivalente a un fuerte sismo de dicha magnitud.
En efecto, si bien es importante evaluar la capacidad de respuesta de la población y las autoridades ante lo ocurrido en Mala y Lima, este evento debe acelerar la aplicación de tecnología preventiva.
Precisamente, con motivo del último movimiento telúrico en la capital, que ha causado considerables daños materiales en Cañete, Villa María del Triunfo y las zonas pobladas ubicadas en cerros, es acertada la propuesta de Tavera de agilizar la instalación de 106 estaciones de Sistema de Alerta Sísmica Peruana (SASPE) en el litoral peruano, con el fin de proteger a unos 18 millones de habitantes que residen en las regiones costeras del país, incluida Piura.
Las serias advertencias también deberían motivar al Ministerio de Transportes a habilitar cuanto antes, así como explicar de manera clara, el sistema de mensajería de texto que viene probando desde hace buen tiempo. ¿Funcionó el martes en Lima?
Otro aspecto importante es que el nuevo Gobierno afiance la cultura de prevención, descuidada debido a la pandemia. Es importante cambiar el chip en la mente de los peruanos de que un sismo es un desastre. Se convierte en desastre por falta preparación, cuando no hay cultura de prevención. Un primer paso para prevenir es tomar conciencia de que la Tierra tiene su propio desarrollo evolutivo y que los sismos han ocurrido y ocurrirán sin que podamos evitarlo.
El otro gran paso es insistir en la participación de la población. En ese sentido todos los hogares piuranos tiene el deber de participar este 29 de junio a las 10 a.m. en el primer Simulacro Familiar Multipeligro que desarrollará el COER en el contexto de la pandemia del COVID-19.