El presidente de la República, José Jerí, presentó durante su participación en la Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE 2025) un ambicioso plan destinado a transformar el sector turismo en el Perú. En su discurso, el mandatario calificó al turismo como un “motor de inclusión, cultura y orgullo nacional”, destacando que su gestión busca dejar las bases de un crecimiento sostenido más allá de su periodo de gobierno.
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Ante un auditorio compuesto por líderes empresariales, autoridades y representantes del sector privado, Jerí subrayó que, aunque su administración es de transición, no es un gobierno “inmóvil”. Aseguró que el Ejecutivo está decidido a garantizar tres pilares esenciales: seguridad, transparencia electoral y crecimiento económico. Bajo esa premisa, el presidente delineó un conjunto de acciones económicas y normativas para fortalecer el turismo nacional hacia el año 2030.
Un plan estratégico para fortalecer el turismo peruano
El mandatario explicó que el plan contempla dos grandes líneas de acción: una financiera y otra regulatoria. Ambas apuntan a “construir las bases del futuro para nuestro país”, promoviendo una inversión sólida, responsable y sostenible. En ese sentido, anunció la próxima aprobación del reglamento de la nueva Ley General de Turismo, instrumento que establecerá un marco normativo moderno y competitivo para el desarrollo del sector.
“Aprobaremos el reglamento de la nueva Ley General de Turismo con la meta de atraer más de 1,000 millones de dólares en inversiones al 2030, generar 34,000 empleos y formalizar a más de 5,000 prestadoras turísticas”, precisó Jerí durante su intervención. Estas metas, según detalló, reflejan una visión integral en la que el turismo no solo impulsa la economía, sino también la formalización y el empleo en distintas regiones del país.
El rol del sector privado y la simplificación del Estado
El presidente Jerí reiteró su convicción de que el sector privado es un actor esencial en la generación de empleo y productividad. “La mejor herramienta contra la pobreza es el trabajo formal y sostenible que generan las empresas”, señaló. En esa línea, aseguró que el Estado debe cumplir un rol facilitador y no obstaculizador, eliminando trabas burocráticas que frenan la inversión.
Para ello, el Ejecutivo proyecta un “shock de desburocratización”, una política destinada a simplificar trámites y acelerar los procesos administrativos en los sectores productivos. Esta iniciativa, según explicó, permitirá dinamizar las inversiones, reducir costos y mejorar la competitividad del país en el mercado turístico global.
Inversión histórica en megaproyectos turísticos
Como parte complementaria del plan, el Gobierno anunció una cartera de megaproyectos de infraestructura turística que representan una inversión superior a 2,400 millones de dólares. Este componente tiene como objetivo fortalecer la conectividad, mejorar la oferta de servicios y potenciar destinos emblemáticos que posicionen al Perú como uno de los principales referentes turísticos de Sudamérica.
Destinos priorizados por el plan de Jerí
Entre los destinos priorizados se encuentran Arequipa y el valle del Colca, así como las playas del norte de Piura y Tumbes, zonas reconocidas por su alto potencial turístico y su aporte al turismo interno y receptivo. Además, se contempla la consolidación del corredor turístico Macronorte, una propuesta que integra circuitos de naturaleza, cultura y gastronomía en la costa y la sierra norte del país.
De acuerdo con las proyecciones del Ejecutivo, estos proyectos beneficiarán a más de cinco millones de viajeros nacionales e internacionales, dinamizando la economía local y generando nuevas oportunidades de empleo directo e indirecto. Asimismo, se espera que estas inversiones contribuyan a mejorar la infraestructura hotelera, la conectividad vial y los servicios complementarios en las regiones involucradas.
Metas al 2030 y visión de desarrollo sostenible
El plan turístico impulsado por Jerí tiene una proyección al 2030 y busca consolidar al Perú como un destino competitivo, sostenible e inclusivo. Las metas se centran en atraer inversión extranjera, aumentar el flujo de visitantes, mejorar la experiencia del turista y fortalecer la identidad cultural en cada región.
El mandatario resaltó que este impulso al turismo va de la mano con políticas de sostenibilidad ambiental y responsabilidad social. “El turismo debe ser una fuerza que proteja nuestro patrimonio y mejore la vida de nuestras comunidades”, enfatizó. En ese sentido, el Gobierno trabajará junto a gobiernos regionales, municipalidades y comunidades locales para garantizar que los beneficios del desarrollo turístico lleguen a todos los peruanos.
Turismo como motor de inclusión y orgullo nacional
Durante su exposición, Jerí recordó que el turismo es una industria transversal que integra cultura, gastronomía, historia y naturaleza. “Cada turista que llega al Perú no solo deja divisas, sino también reconocimiento a nuestro talento, a nuestra historia y a nuestra diversidad”, sostuvo. Este enfoque de inclusión y orgullo nacional busca que el turismo sea también una herramienta de cohesión social y de revalorización del patrimonio.
Además, el presidente indicó que el Ejecutivo continuará trabajando en la promoción internacional del Perú, reforzando la cooperación con organismos internacionales y mejorando las estrategias de marketing turístico en los principales mercados emisores. Estas acciones buscan recuperar los niveles previos a la pandemia y superar los récords de llegada de visitantes extranjeros.
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