La economía peruana continúa mostrando señales de fortaleza pese a la persistente inestabilidad política y a los desafíos en materia de seguridad ciudadana. Los indicadores macroeconómicos cerraron el 2025 con resultados positivos y las proyecciones para el 2026 mantienen un sesgo optimista, incluso tratándose de un año electoral.
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Economía peruana supera expectativas del mercado
“Nuestra economía ha mostrado un desempeño sólido durante el 2025, superando las expectativas iniciales”, señala el economista y docente de Pacífico Business School, Jimmy Astocóndor. De acuerdo con su análisis, el crecimiento estuvo impulsado principalmente por la demanda interna, que avanzó alrededor de 6%, sostenida por un consumo privado fortalecido gracias al aumento de los ingresos reales y al retiro de fondos de las AFP.
No obstante, Astocóndor subraya que el verdadero motor del ciclo expansivo ha sido la inversión privada, que registró un crecimiento excepcional de 11.4% en el tercer trimestre del 2025, el más alto desde el 2013. “Esta aceleración se explica por la ejecución de proyectos mineros, de construcción e infraestructura, lo cual refleja una recuperación significativa de la confianza empresarial”, afirma.
Crecimiento sostenido y cifras oficiales
Desde la Asociación Automotriz del Perú (AAP), su gerente de Estudios Económicos, Alberto Morisaki, coincide en que el desempeño económico ha sido mejor de lo previsto. En octubre último, la economía nacional avanzó 3.6% interanual, acumulando 22 meses consecutivos de crecimiento.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), entre enero y octubre del 2025 el producto bruto interno (PBI) creció 3.4% frente al mismo periodo del año anterior, mientras que el crecimiento anualizado —noviembre 2024 a octubre 2025— se ubicó en 3.7%.
Morisaki explica que hacia el cierre del año se observó una moderación gradual del ritmo de expansión, debido principalmente a un efecto estadístico por una base de comparación elevada. Aun así, estima que la economía peruana cerró el 2025 con un crecimiento cercano al 3.5%.
Entorno internacional y factores externos
El desempeño local se da en un contexto de mejora de la economía mundial. Las proyecciones de crecimiento global fueron ajustadas al alza, de 2.9% a 3.1% para el 2025 y de 2.8% a 3% para el 2026. En particular, destaca el mejor desempeño de Estados Unidos y China, impulsado por mayores inversiones en inteligencia artificial y una menor incertidumbre comercial.
Este escenario externo favorable también se refleja en precios de commodities que se mantienen en niveles elevados, beneficiando a países exportadores como el Perú.
Perspectivas económicas para el 2026
De cara al 2026, Jimmy Astocóndor señala que existe un consenso de mercado que sitúa el crecimiento económico entre 2.8% y 3.2%. Entre los principales factores de soporte figuran una inversión privada sostenida, la continuidad de grandes proyectos mineros y de infraestructura, así como términos de intercambio excepcionales, que alcanzarían su nivel más alto en los últimos 75 años.
Además, se prevé un impulso adicional al consumo por el efecto del octavo retiro de fondos de las AFP durante el verano del 2026. La demanda interna, en ese contexto, crecería alrededor de 4.3% anual, con una recuperación poselectoral que reduciría la incertidumbre después de abril.
Astocóndor añade que la política monetaria podría volverse más favorable, con una eventual reducción de la tasa de referencia del Banco Central de Reserva (BCR) hasta 4%.
Liquidez, consumo y confianza empresarial
Para Morisaki, la liberación de recursos provenientes de las cuentas de AFP y de la Compensación por Tiempo de Servicios (CTS), junto con los buenos resultados empresariales del 2025, se traducirán en un importante reparto de utilidades durante el 2026. Esto generará una mayor inyección de liquidez en la economía y fortalecerá el consumo.
Todo ello, sumado a la resiliencia del gasto de los hogares y de la inversión privada, configura un escenario propicio para un crecimiento cercano al 3%, incluso en un año marcado por las elecciones generales.
Inversión privada lidera el crecimiento
El Departamento de Estudios Económicos del Scotiabank coincide en que la economía peruana ingresará al 2026 con impulso. En su reporte semanal, destaca que la inversión privada lideró el crecimiento en el tercer trimestre del 2025, con una expansión cercana al 11%, acompañada de un mercado laboral dinámico y términos de intercambio en niveles récord.
La entidad financiera proyecta un crecimiento de 3.2% para el 2026, con un sesgo al alza, sustentado en una recuperación más firme de la demanda interna y en expectativas empresariales que se mantienen optimistas tanto en el corto como en el mediano plazo.
Proyecciones del BCR y sectores clave
El Banco Central de Reserva destaca que la inversión privada crecería 9.5% en el 2025, impulsada principalmente por la inversión no residencial. Para el 2026 y 2027, el ente emisor proyecta una expansión de 5% anual, acumulando tres años consecutivos de crecimiento por encima del producto.
Asimismo, el BCR revisó al alza su proyección de crecimiento del PBI para el 2025, de 3.2% a 3.3%, y ajustó la del 2026 de 2.9% a 3%, tasa que también se mantendría en el 2027.
En el sector minero, la inversión acumulada entre enero y octubre del 2025 ascendió a US$ 4,482 millones, lo que representa un aumento de 17.7% frente al mismo periodo del año anterior, según el Ministerio de Energía y Minas (Minem).
Por su parte, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) informó que el Equipo Especializado de Seguimiento a la Inversión concentrará esfuerzos en destrabar más de 50 proyectos estratégicos, cuya cartera supera los US$ 4,000 millones.
Factores internos y externos en el 2026
¿Qué pesará más en la economía peruana durante el 2026: los factores internos o los externos? Para Morisaki, ambos jugarán un rol clave. El consumo privado y la inversión privada seguirán generando un círculo virtuoso que impactará positivamente en el PBI, mientras que las expectativas empresariales se mantendrán en terreno optimista.
Desde una mirada de largo plazo, Astocóndor recuerda que, según análisis del MEF y del Ceplan, entre 50% y 60% de la variabilidad del crecimiento del PBI está asociada a factores externos, proporción que se mantendría en el 2026.
(Andina)
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