El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este martes la imposición de un nuevo arancel del 50 % sobre el cobre importado y advirtió que evalúa aplicar una tarifa de hasta el 200 % a los productos farmacéuticos fabricados fuera del país, como parte de su estrategia para incentivar la relocalización industrial.
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Durante la sexta reunión de su gabinete desde que inició su segundo mandato el 20 de enero, Trump explicó que el nuevo impuesto al cobre se suma a los ya establecidos sobre el acero y el aluminio. Aunque no ofreció mayores detalles, el mandatario republicano reiteró su objetivo de reforzar la producción nacional y reducir la dependencia de insumos extranjeros.
Plazo para farmacéuticas y advertencia de sanciones
Trump lanzó una advertencia directa a las empresas farmacéuticas: si no trasladan su producción a Estados Unidos, enfrentarán aranceles de hasta el 200 %. “Les daremos un año, un año y medio. Después se les aplicarán tarifas muy altas si quieren traer medicamentos y otros productos al país”, declaró.
El mandatario acusó a gobiernos anteriores de permitir la deslocalización de industrias clave. “Todos se fueron. Se fueron a otros países porque las administraciones pasadas lo permitieron. Eso se acabó”, expresó con firmeza ante su equipo de gobierno.
Tensión comercial y nuevos acuerdos
El anuncio ocurre un día antes del vencimiento del plazo que la Casa Blanca otorgó a sus socios comerciales para negociar nuevas tarifas que reemplacen los aranceles recíprocos. Hasta la fecha, solo se han alcanzado acuerdos con China, Reino Unido y Vietnam. La tregua comercial de 90 días, anunciada en abril, fue extendida hasta el 1 de agosto.
Esta nueva ofensiva comercial podría reconfigurar los flujos globales de producción y exportación, especialmente en sectores estratégicos como minería y salud.
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