En medio de la crisis económica derivada de la pandemia del COVID-19, el ahorro del sector privado en el país creció 10% en el tercer trimestre del 2020 respecto al mismo período del 2019, un año sin las turbulencias actuales.
Así, de forma inusual, pasó de representar 17,4% del producto bruto interno (PBI) en el 2019, a significar el 26,5% durante el año de la pandemia.
Este fenómeno -según explicó Bruno Seminario, profesor principal de economía de la Universidad del Pacífico- responde al aumento del ahorro de las familias y de las empresas, pues solo están gastando 3/4 de sus ingresos.
“En el caso de las familias, el factor crucial se debe probablemente a la imposibilidad de consumir servicios, ya que la pandemia afecta fundamentalmente el consumo de los mismos”, mencionó.
Justamente, dicho sector redujo en tres puntos porcentuales su participación en el PBI.
Para Seminario, esta coyuntura se mantendría hasta mediados de este año, por lo que ese factor se podría convertir en el principal problema macroeconómico del 2021.