El alza de los precios de los fertilizantes podría provocar no solo que los precios de los alimentos suban, sino que escaseen. Los agricultores de Piura están decididos a no sembrar productos como arroz, yuca, camote, maíz, menestras y otros. Además dejarían de abonar el limón y otros frutales.

Según explica el dirigente agrario, Arnulfo Adrianzén, se el alto precio de estos productos está quebrando a los campesinos. “En plena pandemia hemos comprado la urea a 79 soles. Hoy está en 220 soles y sigue subiendo”, explicó.

En el caso del cultivo de arroz, para adquirir una bolsa de urea los productores deben vender cuatro sacos de arroz en cáscara.

Una hectárea produce unos 200 sacos aproximadamente y por cada hectárea se necesitan 12 bolsas de urea y cuatro de sulfato de amonio, un fertilizante que estaba a 39 soles y hoy está a 105 soles. “Todos los cultivos necesitan fertilizantes, la yuca, el camote, el maíz y eso ya podremos producir”, agrega.

Ante esta situación los productores están planificando un paro agrario a nivel nacional. Sin embargo, el Ministerio de Agricultura les ha pedido dialogar antes.

Un vocero de la Junta Nacional de Usuarios de Riego explicó que esta semana se definirá la medida de protesta. Todo depende de lo que se acuerde con el Ministerio de Agricultura

Según explican los agricultores de San Lorenzo, el planteamiento de la Junta Nacional de Usuarios es que los fertilizantes se coloquen en un fondo de estabilización para que los precios no suban en forma desmesurada.

Adrianzén, por su parte señala que el Ministerio de Agricultura debe importar urea y entregarle directamente al productor. “El subsidio debe ser directo, para que no suceda lo mismo que con los combustibles que están en un fondo de estabilización, pero siguen subiendo”.

Una medida de solución que adoptado el Gobierno es subsidiar a los pequeños agricultores con sumas que van desde los 350 hasta los 1.350 soles. Para hacer efectivo este dinero, el productor debe comprar el fertilizante y con la boleta de compra realizar su trámite para la devolución. El mecanismo no se ha establecido, pero se señala que será para quienes tienen entre dos y diez hectáreas. “Y los pequeños, los que siembran menos de dos hectáreas, ¿que son la mayoría, qué van hacer?, señala Adrianzén. Según el ingeniero agrónomo, Graciano Infante, la agricultura ya no es rentable. “Al alto costo de los fertilizantes se debe agregar el pago de jornales, maquinaria para preparar la tierra, semillas, abonos foliares, agua y en algunos casos herbicidas y plaquicidas químicos”, dice.