Piura. Un calvario viven los
moradores de cinco urbanizaciones y un condominio por el incremento de la
prostitutas extranjeras y peruanas, quienes han tomado las esquinas y calles de estos vecindarios para
ofrecer sus servicios sexuales.
Las trabajadoras sexuales son protegidas por sus
proxenetas ubicados estratégicamente.
El secretario general de la Juveco de la
urbanización Bello Horizonte, Martín Lescano Rojas, indicó que los vecinos ya no saben qué hacer para frenar la
prostitución.
“La Policía llega a la zona, corre a las prostitutas, se van los patrulleros y al rato las ‘boquitas pintadas’ vuelven a ocupar las calles”, dijo.
El dirigente vecinal indicó que la Fiscalía Especializada en Trata de Personas de Piura
ha abierto una carpeta fiscal sobre la nueva “zona rosa” de Piura.
Agregó que la
Juveco ha enviado memoriales y documentos dando a conocer esta problemática a la Prefectura, Dirección Regional de Salud y Policía Nacional; sin embargo,
no se ven resultados
Toman las calles
Lescano precisó que
desde el 2020 la prostitución se adueñó de las calles.
“Los vecinos ante esta situación organizaron más de 10 protestas, lo que conllevó a que se ejecuten operativos, pero no es suficiente”, señaló.
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