Redacción El Tiempo

El colectivo civil plantea que para recuperar la gobernabilidad y asegurar la inversión privada, el presidente Pedro Castillo debe olvidarse de la Asamblea Constituyente en el país.

– ¿Cómo califica los primeros 100 días de gobierno?

Con mucha pena creemos que han sido 100 días perdidos. Un período donde no ha habido una consolidación política, donde no ha habido apertura de los partidos en el Congreso. Para empujar el coche de la gobernabilidad del país, primero el señor Pedro Castillo tendría que olvidarse de la [Asamblea] Constituyente de manera definitiva y dedicarse a reactivar la economía del país, que es lo que necesitamos con suma urgencia.

– ¿Cuál ha sido el sector más dañado?

La economía por supuesto.El día de hoy no solo estamos con fuga de capitales, sino que tenemos el dólar más caro de Sudamérica y el combustible más caro de muchos países del mundo. El gobierno tiene que ver la manera de cómo hacer renegociaciones y buscar nuevos proveedores [de petróleo]. Ese tipo de negociaciones tienen que hacerse a la brevedad y para ello el señor Pedro Castillo tiene que rodearse de gente proba y profesionales competentes.

– Pero el ministro Francke dice que el alza de precios es un fenómeno mundial…

Creo que único fenómeno que ve el señor está en sus sueños. […] Hasta el año pasado, traer un container de cualquier producto costaba 5.000 dólares, hoy cuesta tres veces más. Todos los productos de importación como el maíz y trigo se compran en dólares. Si el dólar sube, automáticamente los costos suben en toda la cadena de repartición. Las ollas comunes, a las cuales asistimos como colectivo civil, nos piden a gritos que sigamos con la ayuda, porque no les alcanza. Antes cocinaban con balones de gas, pero ahora recolectan leña para su comida.

– ¿Se refiere a que la inestabilidad afecta el dólar?

Sí. Si el señor Castillo buscara una conciliación ciudadana debería irse olvidando de la Constituyente que es lo que pidiendo el país. Es lo que al inversionista nacional e internacional no les permite asegurar su inversión en el país, donde podría originar miles de puestos de trabajo e impuestos. Todo ello [asamblea] hace que aguanten su inversión o se la lleven hacia otros países.

– ¿Qué implicaría una Asamblea Constituyente?

Le estaría dando poder absoluto al gobierno que podría perennizarse como ya sucedió en Cuba o Venezuela. Esperamos que Chile se libre de este tema como sucedió en Bolivia.

– ¿Está en riesgo la democracia con una asamblea?

Por supuesto. […] él pretende que esta constituyente esté definida por 60% de miembros gremiales, que son los que ellos manejan, y el 40% de los partidos políticos. ¿Cómo no van a tener el poder absoluto para hacer el cambio que ellos quieran? Si ellos cambian la reelección inmediata, vamos a tener a Pedro Castillo por 20 a 30 años y los que más van a sufrir son los que viven el día a día, que tendremos que migrar a otros países como lo hicieron 7 millones de venezolanos que están en el resto del mundo. No vamos a permitir que nosotros pasemos lo que ellos están pasando.