Profesor Julio Calmet Gómez
Les presento mis cordiales saludos. Que Dios los guarde junto a sus familias. El pasado sábado 1 de noviembre se realizaron las elecciones para nombrar la nueva Junta Directiva del Club Atlético Grau de Piura. Don Arturo Ríos Ibáñez fue reelegido por segunda vez dentro de la lista única para continuar como presidente por otro período de cinco años, hasta el 2030.
Por asociación de recuerdos, vino a mi mente la época del presidente don Orlando Balarezo Calle, quien estuvo al frente de la institución desde 1959 hasta 1967, ocho años, años en que la afición piurana disfrutó del buen juego de futbolistas natos de nuestro departamento, venidos de Talara, Sullana, Paita, y otros jugadores de afuera cuya calidad era indiscutible.
Orlando Balarezo Calle
Asumió a la presidencia tras el mandato de Fermín Estrada y entregó el cargo a Calixto Romero Seminario, después de saborear un trago amargo ante el golpe institucional que propiciaron los antiguos directivos por discrepancias propias de los quehaceres deportivos. La asamblea general de socios determinó su separación. Balarezo Calle, “era el dueño del Grau”, su autoridad de mando era notoria y la resonancia de su voz era muy conocida.
En la década del 60 fuimos testigos de la mejor expresión futbolística del Grau. Es que Balarezo mostró visión para contratar jugadores técnicos y con grandes habilidades, nunca le fallaron. Formó con el Grau, el equipo base de la Selección de Piura Campeón Hexagonal de Fútbol, y base del Seleccionado Nacional, Campeón Bolivariano en Barranquilla, Colombia, en 1961.
Disfrutamos de las temporadas internacionales en el estadio Miguel Grau con Barcelona de Ecuador, Always Ready de Bolivia, O. F. K. de Yugoslavia, Banfield de Buenos Aires y Palmeiras de Brasil, con el bicampeón mundial Dyalma Santos que recién había conseguido su segundo título en Chile, en 1962.
Don Orlando tenía muchas relaciones y buenos contactos, su espíritu empresarial aseguraba el éxito de los compromisos deportivos. El Grau, convertido en uno de los mejores equipos del país, jugaba a estadio lleno, lo que significó un empujón para la formalización de la descentralización del fútbol nacional. El nombre de Piura se hacía conocido fuera de las fronteras.
Hoy, el Atlético Grau ha perdido identidad y ni sus barras le llevan aliento a Sullana. Como casi todos los equipos de provincias se contentan con pelear para conseguir un cupo en la copa Sudamericana, y ya ni eso, juegan para evitar el descenso. Universitario, Alianza Lima y Cristal son los que pugnan por los títulos.
Anécdota en carne propia
Trabajábamos con Pedro Erasmo Dediós Noblecilla (QEPD) en “Ovación” de Radio Progreso y viajamos un domingo a Sullana para trasmitir un partido del Grau. Terminado el cotejo decidimos almorzar donde “La Chula”, una de las picanterías instaladas dentro del estadio.
-¡Pedro Erasmo, acércate!- Era la voz de don Orlando que tenía mucha amistad con Pedro. “¡Hola Calmet!, almorcemos juntos”, invitó. Nos presentó a dos amigos de Sullana. A partir del cebiche hubo mucho consumo. A las cinco de la tarde, don Orlando honró cuentas y se retiró junto con sus amigos; nosotros nos quedamos, pero algo no estuvo bien porque quisieron cobrarnos un consumo que no era nuestro, al negarnos a pagar fuimos a parar al puesto policial de Bellavista, “hasta que venga el teniente” (que nunca llegó). Dormimos en bancas, felizmente era época de verano.
Salimos al día siguiente a las ocho de la mañana, rumbo al paradero de autos en la Avenida Grau, frente al cine. Resulta que en el auto que llegaba de Piura venía Juan Guerra, que tenía familia en Sullana. Un poco sorprendido, preguntó: ¿Qué? ¿recién se regresan?, se ve que les ha ido muy bien. -Sí, nos ha ido muy bien. -solo atinamos decir.
…Y así concluyo, queridos amigos.











