Según un estudio de mercado de Statista, la cifra de jugadores de apuestas online superará los 281 millones en 2029. Teniendo en cuenta que estos se contabilizaban en solo 8 millones, el crecimiento de los juegos en línea es clara. Detrás de este boom están, claro, los casinos online, que se han beneficiado claramente del proceso de digitalización que ha experimentado nuestra sociedad.
Los casinos de toda la vida siguen existiendo, claro, pero la popularidad de los casinos online ponen en evidencia cada vez más sus diferencias. Vamos a comparar los casinos online y los casinos físicos para entender la situación actual del sector.
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Localización
Empezamos por una diferencia obvia y que ya se intuye por el nombre. Los casinos online y los casinos físicos no se desarrollan en el mismo espacio. Por un lado, las salas de juego de toda la vida llevan a cabo su actividad en edificios reales, como los conocidos casinos de Las Vegas. En cambio, los casinos en línea ofrecen sus servicios por Internet, por lo que los jugadores no deben desplazarse a ninguna ubicación concreta para poder jugar. Solo necesitan un dispositivo con conexión.
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Juegos
Como hemos dicho, los casinos online y los casinos físicos no desarrollan su actividad de la misma forma, lo que también incluye la forma que tienen de ofrecer los juegos a sus clientes. En general, ambas modalidades tienen una oferta similar, con opciones tan populares como el póquer, la ruleta o el bingo. Sin embargo, los casinos físicos están más limitados en las variantes que pueden ofrecer, mientras que las plataformas online cada vez ofrecen más versiones, incluidas las temáticas.
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Contrincantes
Ir a un casino físico tiene la ventaja de poder socializar con otros jugadores, pues estos se verán las caras (literalmente) en la mesa de juego. Esto permite estudiar sus reacciones y sus expresiones corporales durante la partida, algo que resulta mucho más difícil en los casinos online. Aunque cada vez son más las plataformas en línea que incorporan tecnologías para dar ese componente humano al juego, difícilmente podrá igualarse a la sensación real de estar jugando contra alguien en persona.
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Torneos
Por ahora, hay muchos más torneos que tienen en lugar físicamente que online. Además, los jugadores más reputados del sector siguen saliendo de las competiciones de toda la vida, como la Serie Mundial de Póker. No obstante, los campeonatos que ya se ofrecen en el entorno online tienen una ventaja respecto a los torneos tradicionales: ofrecen las partidas simultáneas.
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Premios
Uno de los motivos por los que los jugadores profesionales siguen prefiriendo los torneos en vivo es porque siguen siendo los que ofrecen recompensas mayores. Los premios de las competiciones en casinos físicos pueden llegar a alcanzar las seis cifras, algo más difícil de encontrar cuando haces apuestas online. Al mismo tiempo, las ganancias conseguidas en los casinos en línea pueden tardar algunos días en llegar a la cuenta bancaria, mientras que la retirada de fichas en los casinos físicos, siempre y cuando no sean una millonada, suele ser prácticamente instantánea.
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Bonos
Ahora bien, una clara ventaja de los casinos online frente a los físicos son los bonos. Los bonos de casino son alicientes que las plataformas de apuestas ofrecen para atraer la atención de sus clientes. Estos pueden ser, por ejemplo, para recompensar un jugador que acaba de registrarse o para agradecer a otro que lleva una determinada cifra de apuestas seguidas. Eso, en cambio, es más difícil de encontrar en los casinos de siempre.
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Seguridad y privacidad
Son muchos los jugadores que optan por los casinos online porque ofrecen anonimidad. Poder hacer apuestas desde casa, sin tener que interactuar con nadie mientras se juega, les da esa intimidad que tanto ansían. Es cierto, sin embargo, que no todos los casinos en línea ofrecen un nivel de privacidad óptimo, por lo que resulta imprescindible usar plataformas que sí la garanticen. Al jugar por Internet, es igualmente crucial asegurarse de que el casino protege la seguridad de sus jugadores con métodos de pago fiables y reputados. Esto último no suele ser un problema en los casinos de toda la vida, donde a menudo suele usarse metálico.
Para gustos, los colores
Como hemos visto, tanto los casinos online como los casinos físicos tienen sus ventajas y sus inconvenientes. Será una cuestión de gustos apostar por una modalidad u otra. Además, nadie dice que se tenga que optar solo por una: combinarlas permite disfrutar del ambiente y el componente social de las casas de apuestas de siempre y, al mismo tiempo, beneficiarte de poder apostar cuándo quieras y dónde quieras al jugar desde el celular o la computadora.
