Crisis de valores y autoridad

En las últimas 48 horas dos violentas turbas se han enfrentado a la Policía dejando daños materiales y efectivos heridos en el cumplimiento de su trabajo.

Lo grave de esto, no solo es el atentado a la integridad física y a la vida de las personas que realizan la difícil tarea de dar seguridad, sino el desprecio a los valores y a la autoridad misma, tratando de imponer valores y reglas propias.

Igual, en las calles ciertos conductores de servicio público se baten en duelo verbal con los policías; otros no respetan normas ni reglamentos. Los ambulantes creen tener derecho propio sobre las veredas y áreas verdes, mientras que en cada intervención policial, la turba aprovecha el anonimato para pechar a la autoridad, romper e invadir comisarías y agredir físicamente a los efectivos.

Con estos hechos y actos se hace evidente una crisis, una metamorfosis social y cultural que afecta a la población y cuyas causas son diversas, por lo que hace imperativo trabajar en torno a los valores, que son los que nos dan identidad y nos une alrededor de una visión como comunidad, sin ellos no hay orden y sin orden sobreviene el caos. Eso no se puede permitir.